El mundo está en un constante cambio y cuestiones que en otro momento no se daban, hoy son mucho más frecuentes. En particular, María Ruminot y Magalí Gómez, son las primeras operarias viales del Peaje "El Dorado" y El Diario habló con ellas sobre su trabajo, cómo les surgió la posibilidad y demás cuestiones:

- ¿Qué es una Operaria Vial?

- Somos Operadoras Viales, la Asistencia Vial al Usuario en la ruta, ante cualquier acontecimiento anormal que se pueda registrar desde un cambio de neumático, un desperfecto mecánico hasta accidentes leves o graves. Nosotras llegamos al lugar, vemos la gravedad del evento y tomamos las medidas de precaución (corte de carril, balizamiento, despeje de la ruta) para evitar que surja otro accidente. También pueden surgir animales sueltos, que es muy frecuente en la ruta 226.

- ¿Cómo surge para ustedes este trabajo?

- Surge a través de la curiosidad y el reto de ingresar a un sector donde lo primordial es ayudar al prójimo. Siendo conscientes además de que había muchas cosas que aprender desde mecánica hasta cómo convivir en un sector donde solo eran hombres, todo un desafío por dónde lo miremos.

A medida que va pasando el tiempo nos vamos adaptando a la actividad y nos sentimos satisfechas a la hora de elegir este trabajo.

- ¿Cómo llegan convertirse en Operarias Viales?

- Nosotras manifestamos querer ser parte de este sector a nuestro delegado sindical, nos sentimos escuchadas por nuestro Sindicato "SUTPA", quienes fueron los que nos dieron la posibilidad de estar hoy en esta actividad.

- ¿Cómo se sienten a nivel personal respecto de este logro?

- Nos sentimos agradecidas y felices de estar en este lugar, marcando una igualdad de género y pudiendo demostrar que podemos ser escuchadas si nos lo proponemos.

- ¿Sus familias las apoyaron en este camino?

- Si por supuesto, desde el primer momento.

- Teniendo en cuenta que son las primeras operarias viales mujeres ¿es difícil para las mujeres poder trabajar de esto?

- Somos las primeras Operarias Viales del Peaje "El Dorado". Es un desafío pero no difícil. Gracias a SUTPA que promueve la movilidad social ascendente desde hace un tiempo hasta el día de hoy, muchas compañeras se pueden desempeñar en muchos sectores donde solo eran ocupados por hombres. El apoyo que recibimos de nuestro sindicato es fundamental para que la mujer hoy en día en la actividad de peaje pueda ocupar muchos lugares de toma de decisiones. Es un trabajo que con conciencia se puede hacer.

- ¿Consideran que la mujer está empezando a ganar espacios que en otro tiempo no podía?

- Si, la mujer con el tiempo fue perdiendo el miedo y manifestando sus propias necesidades, adquiriendo la igualdad de algunos derechos, pero sabemos que falta mucho camino por recorrer.

Queremos destacar que en nuestro peaje los compañeros viales nos hicieron sentir como una más en el sector.

- ¿Qué le dirían a aquellas mujeres que están trabajando para llegar a un espacio similar al de ustedes?

- Que no tengan miedo, que tengan confianza en sí mismas. Todo se puede lograr sólo hay que animarse.